10 de junio de 2012

Coadjutores somos de Dios


 "Porque nosotros, coadjutores somos de Dios; y vosotros labranza de Dios sois, edificio de Dios sois."


Para empezar a desarrollar este tema, lo primero que debemos saber es el significado de la palabra Coadjutor y según diccionarios, es quien ayuda a otra persona a realizar ciertas actividades.

La Biblia en sus variadas versiones, maneja un sinónimo de Coadjutor con colaborador. De hecho en la Versión reina Valera 1960 el texto base dice: Porque nosotros, colaboradores somos de Dios; y vosotros labranza de Dios sois, edificio de Dios sois.". Y de igual manera, este término denota a una persona que ayuda a otra a realizar ciertas actividades. Mas sin embargo podríamos preguntarnos ¿En que podríamos ayudar al Dios Todo Poderoso, si el tiene todo el poder y la facultad de hacer cualquier cosa?

Las sagradas escrituras nos enseñan que Satan engaño al hombre y por ese engaño el pecado entro al hombre, siendo la paga del pecado la muerte. Romanos 5:18 nos dice: Porque como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así por la obediencia de uno los muchos serán constituidos justos. 
Esto nos habla de que nuestro Señor Jesucristo fue enviado con el propósito de salvar las almas de los hombres. Almas que estaban destinadas a una muerte segura, más que por gracia de Dios, ahora nos permite tener vida eterna en Cristo Jesús. Pero el Señor fue crucificado y generaciones de hombres siguieron después del Divino Maestro, por lo cual, el sabiendo de su partida, llamo a doce hombres para que continuaran con el mismo propósito establecido. Es importante señalar que no solamente fue una bendición recibida de Dios a partir del nacimiento del Salvador, sino desde antes, existieron hombres y mujeres escogidos para guiar al pueblo de Dios por el camino de santidad.

Actualmente el hijo de Dios tiene una gran mision: Por tanto, id, y doctrinad á todos los Gentiles, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado.....Esta, es la obra que el cristiano tiene que llevar a cabo pues así lo ha ordenado el Señor. Esta es la actividad en la que nosotros somos considerados coadjutores de Dios, somos ayudantes en predicar que solo en Cristo Jesús hay la salvación de nuestras almas.

Mas sin embargo, debíamos preguntarnos si estamos capacitados para poder llevar a cabo esta hermosa tarea, pues podríamos hablar como el siervo de Dios Moisés y decir que nosotros somos cortos de palabras, tardos en el habla y torpes de lengua. Por ello, el Espíritu Santo nos recuerda lo que escrito esta para nuestra enseñanza y nos invita a que primero busquemos la unción del altísimo para trabajar en su obra Santa.

Hechos 1:4 al 8 nos dice: Y estando juntos, les mandó que no se fuesen de Jerusalem, sino que esperasen la promesa del Padre, que oísteis, dijo, de mí.Porque Juan á la verdad bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo no muchos días después de estos. Entonces los que se habían juntado le preguntaron, diciendo: Señor, ¿restituirás el reino á Israel en este tiempo? Y les dijo: No toca á vosotros saber los tiempos ó las sazones que el Padre puso en su sola potestad; Mas recibiréis la virtud del Espíritu Santo que vendrá sobre vosotros; y me sereís testigos en Jerusalén, en toda Judea, y Samaria, y hasta lo último de la tierra. 
También Mateo 10: 16 al 20 nos dice: He aquí, yo os envío como á ovejas en medio de lobos: sed pues prudentes como serpientes, y sencillos como palomas. Y guardaos de los hombres: porque os entregarán en concilios, y en sus sinagogas os azotarán; Y aun á príncipes y á reyes seréis llevados por causa de mí, por testimonio á ellos y á los Gentiles. Más cuando os entregaren, no os apuréis por cómo ó qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado qué habéis de hablar. Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. 
Cuántos de nosotros hemos tenido una vivencia en la que hemos platicado con amistades, o compañeros de trabajo o familiares de nuestra salvación y de la existencia de un Dios supremo, mas si recordamos, muchos de nosotros no sabíamos como hacerlo, o no teníamos la capacidad de poder hablar tales cosas, mas el haber sido llenos de su Espíritu Santo es lo que nos permitió hacer participes a los gentiles de la Salud en Cristo Jesús. Así fue como los apóstoles siendo ungidos con el Espíritu Santo pudieron iniciar a edificar la Iglesia de Jesucristo, realizando por la potestad que departe de Dios habían recibido, la conversión de miles de almas al camino del Señor. Si hacemos un análisis de los apóstoles, recordemos que Pedro era pescador, que Mateo era recaudador de impuestos, y que otros tantos eran gente simple, gente sin preparación, pero con un corazón dispuesto a seguir al Salvador del Mundo. Dios no ve tu capacidad para hablar, Dios ve que tu corazon este dispuesto a trabajar con Él, de ser un colaborador de El.

Una vez que hemos recibido la prenda del Espíritu Santo, lo que tenemos que hacer es VIVIR EN SANTIDAD. En el inicio del capítulo 3 de la 1a. Epístola a Timoteo leemos lo siguiente: "De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como carnales, como a niños en Cristo. Porque todavía sois carnales, pues habiendo entre vosotros celos, y contiendas, y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres? Porque diciendo el uno: Yo cierto soy de Pablo; y el otro: Yo de Apolos ¿No sois carnales? 
Es triste ver como actualmente la situación que vivió la Iglesia en Corinto, se repite hasta nuestros días, pues aun hasta nuestros días se escuchan comentarios como: Yo seguiré al Pastor tal, o que bien predica el hermano Tal, o que hermoso canta la hermana Tal…..Esto solo denota que nuestra mirada no esta en nuestro padre Jesucristo, sino en la habilidad del hombre para realizar alguna actividad. A veces pareciera que somos demasiados ciegos para ver la respuesta que el Apostol Pablo le decía a los Corintios:

¿Qué pues es Pablo? ¿y que es Apolos? Ministros por los cuales habeis creido; y eso según que a cada uno ha concedido el Señor. Yo planté, Apolos regó: mas Dios ha dado el crecimiento. Asi que, ni el que planta es algo, no el que riega; sino Dios que da el crecimiento

Por eso el Espíritu Santo nos dice: Así que, si alguno se limpiare de estas cosas, será vaso para honra, santificado, y útil para los usos del Señor, y aparejado para toda buena obra.

La invitación del día de hoy nuevamente se allega a vivir en santidad, apartándonos de celos, contiendas, disensiones y ser solamente Siervos de Jesucristo. Esta invitación de vivir en santidad y no dividiendo a la Iglesia, nos permite también trabajar no solamente en la procalamacion del evangelio, sino también en el cuidado de la amada del Señor. Si realmente somos l Iglesia de Jesucristo hagamos lo que la Iglesia hacia:

Y todos los que creían estaban juntos; y tenían todas las cosas comunes; Y vendían las posesiones, y las haciendas, y repartíanlas á todos, como cada uno había menester.Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y con sencillez de corazón, Alabando á Dios, y teniendo gracia con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día á la iglesia los que habían de ser salvos.

Gracia y Paz de Dios sea con vosotros

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